Comunicado 12 de Junio
COMUNICADO Nº 207, PARA ESTE LUNES, 12 DE JUNIO DE 2023
El próximo jueves, día 15, tendrá lugar una Concentración en Santander, convocada por la Coordinadora Cántabra de Pensionistas, con motivo del “Día Mundial de Toma de Conciencia del Abuso y Maltrato en la Vejez”, establecido por la ONU, como forma de sensibilizar a la población contra esa lacra social.
No en todos los países y culturas es igual el respeto y consideración hacia las personas mayores. Y es en los países llamados desarrollados, donde las formas de vida masificadas, muy vinculadas a un malentendido progreso, basado en convertir todo en mercancía, donde el maltrato y abandono de las personas mayores es más frecuente, llegando a extremos, en muchos casos, vergonzantes.
Quizás en los últimos tiempos, influenciados por la multitud de casos sangrantes, derivados de la pandemia y de algunas políticas reaccionarias e inhumanas, estemos algo más concienciados sobre el problema. Pero el maltrato, en general, es un problema estructural y crónico, que viene de lejos, que se manifiesta en múltiples situaciones, y en todos los lugares, y para cuya erradicación no bastan medidas puntuales, sino que es precisa una política que vaya al fondo del problema y que se traduzca, después, en medidas de todo tipo para abordar el problema en todas sus manifestaciones. Tener muchos años nunca puede ser un problema.
El maltrato no es únicamente físico, que también, sino que se manifiesta en otros muchos aspectos de la vida: sicológicos, sexuales, afectivos, emocionales, familiares, institucionales, sociales, económicos… cada persona mayor es un sujeto de derechos, que tiene su dignidad y que, como consecuencia de la edad, tiene una serie de limitaciones y necesidades concretas y específicas, que es responsabilidad de la sociedad entera atenderlas y tenerlas en consideración.
Maltrato es atemorizar, aterrorizar, amenazar, explotar, rechazar, aislar, ignorar, insultar, humillar o ridiculizar a una persona, lo que se llama abuso mental o sicológico.
El maltrato a una persona de edad consiste en un acto o varios actos repetidos que le causan daño o sufrimiento. Los adultos mayores experimentamos una serie de sentimientos y emociones tales como inseguridad, angustia, tristeza, miedo, impotencia, falta de autoestima y la consecuente desesperanza y aislamiento porque no vemos que se adopten las medidas apropiadas para evitar nuestro dolor y sufrimiento.
En el último año, aproximadamente una de cada seis personas mayores de 60 años sufrió algún tipo de maltrato en los entornos comunitarios. Las tasas de este tipo de maltrato en las instituciones, como las residencias de ancianos y los centros de atención crónica, son elevadas: dos de cada tres trabajadores de estos centros confiesan haber infligido algún tipo de maltrato en el último año, originados por diversas circunstancias. Estos sucesos pueden conllevar graves lesiones físicas y consecuencias psicológicas prolongadas.
Se prevé que este problema aumentará en muchos países debido al rápido envejecimiento de la población. Entre 2019 y 2030, se prevé que el número de personas de 60 años o más aumente en un 38%, pasando de mil millones a mil millones cuatrocientos mil, superando en número a la juventud a nivel mundial.
Desde la Coordinadora Cántabra de Pensionistas, denunciamos los malos tratos que sufren las personas de edad. Pero el maltrato es el caso extremo. Es la manifestación más grave del desprecio y la discriminación que, por razón de la edad, sufren millones de personas en nuestro país.
Desde nuestra Plataforma abogamos por que la edad sea un factor determinante que esté presente en todas las mesas de decisión de los distintos gobiernos: el central, los autonómicos y municipales. Igual que la sociedad va asumiendo que todas las políticas deben contemplarse desde una perspectiva de género, nosotros defendemos que, de igual manera, todas las políticas deben tener en cuenta la edad de las personas a las que van orientadas.
POR QUE LA SOCIEDAD, EN SU CONJUNTO, VALORE LA EXPERIENCIA Y TODOS LOS BENEFICIOS QUE LAS PERSONAS DE EDAD HAN APORTADO Y APORTAN AL BIENESTAR GENERAL
POR QUE LA SOCIEDAD, DESDE LA MÁS TEMPRANA EDAD, INCULQUE EN LAS PERSONAS EL AFECTO Y RESPETO A LOS MAYORES, COMO UN VALOR FUNDAMENTAL DEL DESARROLLO HUMANO
POR QUE LOS GOBIERNOS, EN SUS POLÍTICAS, TRADUZCAN ESE RESPETO Y AFECTOS EN MEDIDAS EFICACES QUE AMINOREN LOS PROBLEMAS DE LA VEJEZ, COMO UNA CONTRIBUCIÓN AL BIENESTAR GENERAL DE LA POBLACIÓN
EN DEFENSA DEL SISTEMA PÚBLICO DE PENSIONES, COMO PILAR BÁSICO QUE ES, PARA QUE LAS PERSONAS MAYORES VIVAN CON DIGNIDAD Y SIN ESTRECHECES
POR UNA PENSIÓN MÍNIMA IGUAL AL SALARIO MÍNIMO
GOBIERNE QUIEN GOBIERNE, LAS PENSIONES SE DEFIENDEN