Comunicado de Aris Rosino sobre su exposición «Mil crisis, una pandemia y seguimos en pie»

Hoy domingo 24 de abril, diez días antes de acabar mi exposición de pintura y escultura, siento la necesidad de RETIRAR TODAS LAS OBRAS de la sala Mauro Muriedas. Estos son los motivos:

Hace más de 1 año que solicité (vía instancia) y se me concedió, la sala municipal Mauro Muriedas de Torrelavega al completo, para exponer diferentes trabajos artísticos en sus distintos espacios. Todo este año he esperado mi turno con mucha ilusión para volver a mostrar mi trabajo en mi ciudad.

Está claro que esta larga espera (más de 1 año) es consecuencia de la escasez de espacios expositivos y de la gran demanda de personas que quieren exponer sus trabajos artísticos. Además de ser la única sala de exposiciones municipal, en ella se aglutinan todo tipo de actividades culturales, en algunos casos solapándose unas con otras.

En mi caso, durante la exposición, además se ha utilizado el espacio para un concierto de música clásica así como para una conferencia, ambos actos en días diferentes, ocupando la sala y sin avisarme. Ha habido gente que quiso visitar la exposición y no procedía. Acepté que eran eventos puntuales y de corta duración... Pero esta semana, estando yo ausente, me comunican varios allegados que se está inaugurando otra exposición de esculturas en la sala, ocupando el hall, sin especificar nada en ningún cartel. Muchas han sido las personas que se han sorprendido, puesto que sabían que mi exposición duraba hasta el 30 de abril. Esta nueva muestra de esculturas dura también hasta el 30 de abril. Nuevamente se vuelven a solapar actividades, pero en este caso, durante varios días. Y nuevamente se hace sin avisar, sin informar, y sin consultar.

Esta dinámica es habitual en la sala y por lo visto, la intención es crear "sinergias" entre diferentes disciplinas artísticas, pero lo que está provocando, en algunos casos, es malestar entre la gente que expone (así me lo han hecho saber varias personas que han expuesto anteriormente y les ha sucedido lo mismo). Y yo me sumo a ese malestar.

Creo que con todo el esfuerzo, dedicación y espera que hay detrás de la muestra de un trabajo artístico, lo menos que se puede hacer es respetarlo, y qué menos que informar y consultar a las personas que están exponiendo en la sala. El problema no es compartir el espacio (ya lo hacemos otras veces). El problema es la falta de espacios que origina que en esta sala se amontonen y se solapen eventos, como ha sucedido en este caso, formándose un batiburrillo en la sala, más que una sinergia, y dando sensación de una total desorganización.

Y como muestra de mi malestar y disconformidad, he decidido retirar todas mis obras de la sala, y en su lugar dejo este texto. Donde antes había obras ahora existe un vacío. Me gustaría que se respetasen estas paredes vacías hasta el 30 de abril (fin de mi exposición), y que no se ocupen antes de tiempo. Con esta acción quiero intentar que esto no se vuelva a repetir. Quiero pedir que se respeten los espacios y los turnos. Y que se respete el trabajo que hay detrás de cada obra de arte.

A ver si todo esto sirve para reflexionar y mejorar, y que no sólo se quede ahí. Hace tiempo que muchas personas en esta ciudad reivindicamos la necesidad de más espacios culturales. Afortunadamente hay demanda, hay mucha gente con mucho potencial en nuestra ciudad, que quiere mostrar y compartir todo lo que está creando.

Lo siento mucho por las personas que no hayáis podido ver la exposición. Os invito a verla en mi estudio de trabajo. Nos vemos pronto.

"Mil crisis, una pandemia y seguimos en pie".

ARIS