Condenas, juicios y delitos de las empresas estilo «desokupa»
La importante investigación sobre las empresas de desokupación llevada a cabo por la web sistema 161 / sistema punk sigue su curso con un nueva ampliación llamada Condenas, juicios y delitos de las empresas estilo «desokupa». A continuación reproducimos su introducción y la referencia a la empresa antiokupas norte de Cantabria para incitar a las personas lectoras a que entren en la web y lean el ariculo completo, así como todas las partes de la investigación.
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A lo largo del tiempo, diversas empresas de desokupación y desalojos han estado implicadas en numerosos delitos, detenciones, incidentes y conflictos. Para facilitar el acceso a esta información, aquí se presenta una recopilación de noticias relevantes sobre el tema.
Este artículo incluye únicamente las empresas que han generado noticias de interés, ya que muchos artículos son publicidad sin aportar información significativa. Esta es la segunda parte de una investigación centrada en las empresas dedicadas a los desalojos.
El contenido está organizado por empresa, de forma cronológica, y se actualizará con nuevas noticias.
Antiokupas Norte
Antiokupas Norte (B67930123) es una empresa ubicada en Santoña (Cantabria), fundada en 2021 por Miguel L. C. y Jorge S. U. El primero dejó la empresa, quedando Jorge S. U. como administrador único. Este último trabaja como abogado y ha estado vinculado a diversos negocios, como la gestión de máquinas expendedoras, la venta de coches y la comercialización de inmuebles. Su incursión más reciente ha sido en el negocio de los desalojos de viviendas.
La actividad de la empresa ha sido escasa y no ha destacado especialmente, contratando algún portero de discoteca de Santander. El incidente más relevante en el que se han visto involucrados ocurrió en agosto de 2024. Un jubilado de 73 años, enfermo de cáncer, y su esposa, también pensionista, quienes llevaban 13 años pagando el alquiler, se enfrentaron a las presiones de Antiokupas Norte para abandonar su vivienda.
El propietario, José Gómez Cuerno, sobre quien pesa una orden de embargo del alquiler, decidió no recurrir a la vía judicial. En su lugar, cortó el suministro de agua a los jubilados como medida de presión y contrató a una empresa de desalojos extrajudiciales. Los inquilinos durante diciembre, enero y febrero continuaron pagando el alquiler, pero a la cuenta del ayuntamiento, ya que sobre José Gómez pesan dos órdenes de embargo. Los jubilados dejaron de pagar cuando les cortaron el agua y se vieron obligados a ir cada día a la fuente con garrafas.
Fuentes utilizadas
Gessamí Forner (30/08/2024) Un jubilado con cáncer demanda a Antiokupa Norte por acoso inmobiliario. El Salto. Enlace
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