Desatadas

Una olla a presión. Un nudo. Apnea en superficie. No llegar a todo, no llegar a la hora.

Tiempos de vivir en guardia, cuando parece casi preceptivo estar al límite. Días en los que parece que a cada rato estamos en lo últimos metros de la carrera y tenemos que darlo todo en un bucle insano. ¡Corre! ¡corre! ¡corre!

A toda prisa deglutimos comida rápida sin masticar, información rápida sin masticar, consumo rápido, pensamiento y afectos rápidos…

Y para esta maratón diaria suelta lastre, no mires a los lados, tú a lo tuyo, así llegarás antes, así llegarás. Zanahorias, espejismos.

¡Basta!

Queremos la opción de apartarnos del ciclón, de salir de la pista y juntarnos a tomar un te con pastel o unas cervezas. Queremos descalzarnos, desabrocharnos, destensar… gradualmente. Cada cual a su ritmo.

Desatar la palabra, la imaginación, las ganas de crear grandes extensiones para caminar lento y consciente. Cada reunión es  una pequeña  resistencia “anti-running” y el tiempo se nos alarga en cuanto desatamos el último corchete.

Que nada nos apriete estando juntas.

 

¡OS ESPERAMOS!