El «estado de excepción» como norma

Según Agamben, los gobiernos, respaldados por los medios de comunicación, se valen del miedo para declarar estados de excepción para militarizar la vida de las personas y someter a la población con medidas fascistas. Lleva tiempo señalando la "tendencia creciente a utilizar el estado de excepción como paradigma normal de gobierno". Asegura que el coronavirus es el nuevo pretexto para hacerlo, una vez "agotada la excusa del terrorismo".
Y es que el estado de excepción se presenta como la forma legal de aquello que no puede tener forma legal (es la autorización jurídica de saltarse el ordenamiento jurídico) y sus consecuencias son "la limitación de la libertad, aceptada en nombre de un deseo de seguridad que ha sido inducido por los mismos gobiernos que ahora intervienen para satisfacerla".