"Habitar lo común: Bases para una crítica al capitalismo avanzado" A cargo de los editores de la revista RAÍCES

Estarán en La Libre los editores de la revista Raíces de Extremadura para reflexionar con una charla-debate titulada :"Habitar lo común: Bases para una crítica al capitalismo avanzado"
La charla será el próximo sábado 8 de marzo a las 6 de la tarde.

Os presentamos una sinopsis de la charla que nos han proporcionado los ponentes:
El desarrollo técnico que se produjo durante el advenimiento de la sociedad industrial ha supuesto un salto cualitativo y cuantitativo con respecto al modo en que el ser humano ha gestionado su cultura material. Las sociedades industriales han sufrido un desarrollo drástico de las capacidades de producción y dichas fuerzas productivas se han desarrollado hasta límites inimaginables tiempo atrás, pudiendo hablar hoy en día de fuerzas destructivas en lugar de productivas. Fruto de todo esto es la división extrema del trabajo, la jerarquización de las relaciones laborales, la racionalización irracional de la burocracia, la explotación ilimitada de la naturaleza, la mecanización de la producción, la complejidad del conjunto productivo, la creación de una sociedad que funciona como una industria automatizada, mecanizada y compleja. Más aún, durante el siglo veinte las sociedades capitalistas han sufrido otro drástico progreso: el de la artificialización de la existencia humana, el desmontaje de los sistemas campesinos de supervivencia y el desarrollo de la informática y las denominadas nuevas tecnologías.
El sujeto (individual y colectivo) producto de estas transformaciones debe ser analizado bajo una perspectiva diferente a las teorías revolucionarias tradicionales, pues las aspiraciones de la inmensa mayoría de los individuos de la sociedad occidental están más identificadas con las posibilidades de una vida facilitada gracias a la técnica bajo el capitalismo industrial global, que con un ánimo emancipador y revolucionario hacia una sociedad decente.
Las derrotas proletarias del pasado siglo, el advenimiento de la clase media con capacidad de ocio y consumo y el desmantelamiento progresivo del sector primario,  la experiencia de una segunda naturaleza, a saber, la vida artificial de las ciudades, la experiencia del tiempo libre, de ocio, como tiempo de consumo, de alienación, la identificación con los valores capitalistas y no con los de una clase proletaria, nos debe llevar a una reflexión en clave de emancipación social para intentar poner algo de luz sobre cuestiones que se nos plantean acuciantes: el sentido de la libertad no desde un punto de vista retórico sino desde lo que es: una relación social; La responsabilidad individual y colectiva con respecto a la participación en un mundo de producción y consumo como el actual; las posibilidades de reapropiación de los saberes tradicionales de las sociedad campesinas que consiguieron aún con sus limitaciones construir
una cultura material anclada en la necesidad de gestionar de forma sostenible y holística sus frágiles entornos rurales; reflexionar sobre el cuerpo teórico de que se debe dotar un entorno que aspire a transformar la sociedad desde una base no industrial; las posibilidades de intervención política en el medio rural y urbano con una perspectiva antidesarrollista.